sábado, 26 de febrero de 2011

Novecento



Curioseando por la cubierta de primera clase del Virginian, un maquinista llamado Danny encuentra una cunita sobre un piano. Con las iniciales T.D Lemon, dentro hay un bebé que le observa con ojos risueños.


Adoptado por Danny y por toda la tripulación del barco, Danny Boodman T.D Lemon Novecento comienza su vida a bordo del transatlántico: de Europa a América y vuelta otra vez, el pequeño se cría en esa isla flotante, entre el carbón de las máquinas y la visión de un océano insondable y azul.


Permanece en el anonimato un tiempo, hasta que un buen día, se cuela en el salón de primera clase, y comienza a tocar las teclas del piano de cola. El pequeño posee un talento innato para la música. Con el paso del tiempo, es contratado por la orquesta del Virginian, con quien toca cada noche.


Novecento nunca ha pisado suelo firme y, sin embargo, conoce los entresijos de mundo. Describe lugares, personas y sentimientos; todo ello a través de la música. La melodía del piano le mantiene vivo; es su forma de abrirse al mundo. En un momento dado, entabla amistad con el joven trompetista contratado para la orquesta; una amistad sincera que sobrevive al paso del tiempo.


Ayer vi la película en que está basada la novela de Alessandro Baricco. Fue lo primero que leí del escritor italiano; más tarde llegó a mis manos Seda (Seta en su título original), que también me cautivó.


Novecento es una novela corta, un cuento y una fábula; todo esto a la vez. Sabor a jazz, a la amistad, y al pasado añorado que nunca vuelve. Notas de recuerdos, melancolía y teclas de piano.


Os la recomiendo: de extensión reducida, pero intrigante y, sobre todo, original. Al igual que en Seda, Alessandro Baricco acaricia cada palabra de la historia.


Baker Street.

3 comentarios:

  1. Seta me cautivó. Estoy segura de que Novecento también lo hará.

    ResponderEliminar
  2. Sin duda. Ayer vimos la película en la fundación, y música aparte (espectacular; todo jazz, y de Ennio Morricone nada menos), recordé que me encantó la historia.

    ResponderEliminar
  3. ¿Y la peli de Seda? Genial; otra OST espectacular, de Ryuichi Sakamoto.

    ResponderEliminar