martes, 23 de noviembre de 2010

The Catcher in the Rye

Leyendo Paul Auster me viene a la mente J.D. Salinger (caigo en la cuenta de que sin las dos consonantes frente al apellido, Salinger no parece el mismo); y pienso en su gran obra. El guardián entre el centeno.


El libro me lo recomendó un periodista admirable tras una conferencia en la Universidad de Navarra, y recuerdo que cuando le pedí que me sugiriera un libro no dudó. El guardián entre el centeno. ¿Por qué? Tal vez porque cuando tenía trece años le dijeron que no debía leerlo. No hay razón más indiscutible que ésa. Ni más acorde con el libro.

No pondré sinopsis. Un libro como éste no puede ser resumido en pocas líneas. No necesita presentación.

What really knocks me out is a book that, when you’re all done reading it, you wish the author that wrote it was a terrific friend of yours and you could call him up on the phone whenever you felt like it.

Baker Street

2 comentarios:

  1. Está en mi lista de lecturas pendientes. A ver si hacemos una reunión alternativa; o una lista alternativa... jajajajaja.

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  2. Ya estoy viendo en qué deriva esto... Un club para cada libro.
    ¿Empezamos? Tenemos Baker Street, ahora toca Pemberley. =P!

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